sábado, 23 de octubre de 2010

La estocada final a ‘The Foundry’

The Foundry (la fundidora, en español) ya había sido cerrada el pasado 30 de mayo pese a la oposición de miles de londinenses (el grupo en Facebook que se creo para evitar su cierre alberga a más de 4 mil miembros), pero el pasado jueves recibió su estocada final. Destartalado, cutre, sucio, por diez años The Foundry había sido un pub, una galería (más de 2 mil exposiciones gratuitas se hicieron allí), una biblioteca, una sala de conciertos y un importante centro de arte alternativo en el sector de Oxton, en el este de Londres. La propiedad fue vendida a una cadena de hoteles, que demolerá el edificio actual (cubierto por esta enorme valla publicitaria de una reconocida marca de cerveza) y construirá un hotel temático de arte. Las protestas no sirvieron de nada. El último intento de proteger el edificio (en cuyas paredes alguna vez pintó Banksy, el afamado grafitero inglés) lo protagonizaron un grupo de manifestantes (‘okupas’ o ‘squatter’) que tomaron posesión ilegal del edificio en junio, siguieron realizando las actividades culturales tradicionales y pospusieron la demolición del edificio. Pero la cadena hotelera volvió a ganar, los okupas fueron desalojados el pasado jueves y las nuevas manifestaciones artísticas que llegarán a este terreno, sólo podrá ser visto por quienes puedan pagar por ver.

Agosto de 2010. Para Express News

El vuelo del 'London eye'

Tan lejos como puede volar esta gaviota, así viajará el ‘London eye’, en su décimo aniversario. Pero no es que esta noria, de dos mil toneladas, vaya a ser trasladada, como se discutió hace unos años, sino que la ‘Royal Mail’ la homenajeará, desde esta semana, con diez estampillas que muestran varias facetas de esta rueda de 135 metros de altura. Entre la colección, se encuentra el primer bosquejo del proyecto que participó en la convocatoria que en 1993 buscaba un monumento que le diera la bienvenida al nuevo milenio. El ‘London eye’ fue instalado en marzo del 2000 y desde entonces más de 38 millones de personas han disfrutado de esta atracción, que hasta el año 2006 fue la noria-mirador más alta del mundo. La también conocida como ‘Rueda del milenio’ tiene 32 cápsulas, una por cada distrito de Londres, según los registros, 433 bodas se han celebrado en ella y en el último San Valentín se hicieron 34 propuestas de matrimonio.

Agosto de 2010. Para Express News

jueves, 14 de octubre de 2010

Siempre joven


Hace 60 años existía un lugar en Ghana, África, donde un hombre prometía lo que la ciencia, cincuenta años después, no ha logrado conseguir: la juventud eterna. Su maestría para manipular una cámara fotográfica era la que le permitía conjurar este hechizo, al que recurrían los recién casados, los obreros, los artistas, los políticos, las señoras, las quinceañeras. Todos visitaban ‘Siempre joven’, el estudio del fotógrafo James Barnor, que más tarde inmortalizaría al boxeador Mohammad Alí y al primer presidente de Ghana (impulsor del panafricanismo), Kwame Nkrumah. Más de medio siglo después, en Londres, Barnor sigue siendo un hechicero poderoso, que mientras expone las mejores fotos de su carrera (estarán en Rivington Place, hasta el 17 de noviembre), retrata a unos pocos privilegiados que tienen que obedecer sus órdenes de “no sonría”, “abrácela”, “párese derecho”. Todo por esa poderosa dosis de inmortalidad que es la fotografía y que hoy, gracias a Barnor, nos permite apreciar la transición de dos sociedades, la ghanesa independizándose del Reino Unido, y la londinense, transformándose en la metrópoli cosmopolita y multicultural que es hoy.

Octubre de 2010. Para Express News

domingo, 10 de octubre de 2010

Detrás de Banksy

Para esta turista italiana encontrar este estencil, que aparece en su guía de Londres, no fue fácil. Ahí dónde usted lo ve, cubierto por plantas, rodeado de latas de cerveza vacías, abandonado, este dibujo fue hecho por uno de los artistas ingleses más reconocidos del momento, que, aunque es muy famoso, pocos han visto su cara. Se hace llamar Banksy y se hizo célebre por burlarse de los íconos más famosos del Reino Unido, en las paredes de sus propias ciudades. Por dibujar a un guardia de la reina (con su gorro de piel de oso y su chaqueta roja) orinando en una calle, a dos policías besándose apasionadamente, y a su majestad Victoria recibiendo sexo oral. Si no estuviera tan descuidado, usted podría ver en esta pintura (de las pocas que no han sido tapadas, modificadas o vendidas por miles y miles de libras), ubicada entre Old Street y Rivington Street, a un guardia de vigilancia, que en lugar de tener un perro grande y furioso, lleva a un amanerado perro de salón. Saber más sobre este artista no es fácil, por eso la primera película que se hace sobre él, ‘Exit through the gift shop’, ha sido vista en los principales festivales de cine del mundo. Ya estuvo en el Sundance, en el de Berlín y en septiembre se presentará en el festival de San Sebastián, España.

Agosto de 2010. Para Express News



Sillas para soñar

Para ver el atardecer, para tener conversaciones serias, para olvidarse de las cosas serias, para adivinar figuras en las nubes, para imaginar, para hacer planes, para dejar de pensar en el futuro, para inspirarse, para suspirar, para enamorarse, para sentarse a recordar, para dormir, para descansar, para soñar. Hace más de cien años que estas sillas hacen parte de la fría y gris Londres, y hace cuatro que cada verano, un grupo de artistas, diseñadores y celebridades, las intervienen y las despliegan en los principales parques de la ciudad (Royal Parks). El proyecto se llama ‘Deckchair dreams’ y este año cuenta con la participación de siete artistas chinos (también serán exhibidas en el Jardín Botánico de Beijing) y cinco británicos. Hay 700 por toda la ciudad, se pueden alquilar, se pueden comprar o simplemente se pueden apreciar. El dinero recaudado irá a proyectos de la ‘Royal Park Foundation’ que también organizó un concurso entre cinco escuelas de niños ingleses y chinos, entre las que se escogerán nuevos diseños que harán parte de la colección. Las hay con mujeres con alas, con gatos meditativos, con aves exóticas, con caligrafías asiáticas, con flores de colores, y con muchos londinenses dispuestos a soñar sobre ellas.

Julio de 2010. Para Express News

viernes, 8 de octubre de 2010

Londres en dos ruedas


A los buses rojos y a los taxis negros se les acabó su cuarto de hora con los turistas. Ahora lo in es tomarse fotos en estos estacionamientos azules o Docking Station, que desde el próximo viernes, 30 de julio, señalarán las 6 mil bicicletas que el sistema de transporte de Londres pondrá en alquiler en el centro de la ciudad. Para usarlas es necesario afiliarse, y para esto, se debe ser mayor de 18 años, inscribir una dirección, una cuenta bancaria y aceptar los términos de Barclays, el banco que administra y patrocina este servicio. Cuesta 45 libras el año, 5 una semana, o, 1 por un día. Después de hacerse socio, los usuarios podrán tomar la bicicleta en una ‘Docking Station’, hacer viajes de menos media hora y devolverla en otra Docking Station gratis. Si se quiere usar la bici por más tiempo se tendrá que pagar, adicionalmente, 1 libra por media hora más, 6 por dos horas más y así sucesivamente, por lo que se recomienda que se use sólo para viajes cortos, especialmente porque si hay algún retraso en la entrega se cobrará una multa de 150 libras. Si desea afiliarse o si desea tener más información, entre a www.tfl.gov.uk, sólo se reciben pagos con tarjeta débito o crédito ¿Y usted ya se tomó la foto en las Docking Station?

Julio de 2010. Para Express News

jueves, 7 de octubre de 2010

Y explotó la bomba

Dice la ciencia que una bomba es una liberación de calor, presión o energía activada por una causa externa. Dice el sentido común que el cuerpo de un europeo sólo puede reaccionar con espasmos torpes y arrítmicos ante las vibraciones de una cumbia, un bullerengue o una champeta. El pasado jueves 15 de julio la ciencia se impuso sobre el sentido común en el teatro Hackney Empire, en el este de Londres, dónde la música de la banda colombiana Bomba Estéreo, hizo explotar ritmo, movimientos de cadera y sangre caliente en cuerpos que parecían anatómicamente negados para esto.

Obviamente la mitad del auditorio era latino y le dio indicios a la otra mitad de cómo era eso de “bailá y bailá”. Pero la reacción química la produjo la banda, recién llegada de China y después de pasar exitosamente por varios festivales europeos (esta semana se presentarán en Estados Unidos).

La bomba se demoró en explotar. Se empezó a calentar a las 8:10 p.m. con la brasilera Ceú, que con su zamba, bossa nova, dulce y electrónica, logró que el público la acompañara con las palmas y que uno que otro espectador se parara a bailar. Luego de más de una hora de concierto, la gente ya estaba entrando en calor, pese a que el escenario, de sillas numeradas, escalonadas y rodeado de palcos, no fuera el más indicado para un concierto de música latina.

Cumbia sicodélica

Los que ya conocían a Li, vocalista de Bomba, la esperaron de pie y con unas cuantas cervezas en la cabeza. Vestido púrpura, leggings verdes y botas blancas, la paisana de Carlos Vives empezó a cantar muy dentro de la onda suave de Seú. Confundió a sus seguidores, acostumbrados a verla con una flor en el pelo como una cantadora chocoana, o ‘rapeando’ como una neoyorkina.

Empezó más ‘electro’ que ‘cumbé’, pero eso fue sólo para calentar motores, para sulfurar cabezas europeas, a punta de ‘beats’ y distorsiones. Gritó ¡Colombia! y empezó lo bueno… calor, energía y presión explotaron en este teatro, construido en 1901 y en el que alguna vez se presentó Charles Chaplin. Muy pocos se resistieron a pararse, y aún así, desde su silla, con la cabeza, con las manos, con la sonrisa, respondieron a ‘aguasalá’, ‘cosita rica’, ‘Juana’ y otras canciones del álbum Estalla (Blow up), el segundo de la banda.

“Mitad del mar y mitad del río”, como dice la canción Raza (la tercera que cantaron y la que prendió la fiesta), Bomba Estéreo es un grupo de mezclas: su creador es Simón Mejía, blanco, bogotano, electrónico; y su cantante es Liliana Saumet, morena, costeña y tropical. Juntos han logrado mezclar ritmos del folclor afrocolombiano, como la cumbia, el bullerengue y la champeta, con sonidos electrónicos. El resultado es un ‘booooom’ que vibra con letras que hablan de cosas tan simples de la vida cotidiana del país, como tomarse una aguapanela helada o comerse una panelita de coco, y de otras más complejas como las mentiras de los políticos o la superficialidad de algunas ‘Niñas ricas’.

¿Y que sigue después de una explosión? Pues ‘Fuego’, la canción que por estos días no falta en ninguna discoteca de Colombia, que poco a poco se ha ido expandiendo a los rumbeaderos de latinomérica, y que, cómo quedó demostrado en Londres el pasado jueves, es capaz de derretir las células de hielo del más helado de los europeos.

Julio de 2010. Para Express News

domingo, 3 de octubre de 2010

¿Westminster o Westmonster?


¿Se acabó la fiesta o se acabó el desastre? Ya no se verán más "peacenicks" como este, en las afueras de la abadía de Westminster. Después de más de dos meses acampando en Parlament Square, el grupo de manifestantes que pedía el fin de la guerra en Afganistán fue obligado a desmantelar su campamento, ubicado en pleno corazón de Londres y en una plaza considerada Patrimonio de la Humanidad. De espaldas a la escultura del ex primer ministro inglés, Winston Churchill, y frente al rostro sonriente de la de Nelson Mandela, este grupo de activistas políticos habían instalado sus carpas y pancartas el pasado 1 de mayo. Pero con el pasar de los días, todo tipo de personas, incluidos muchos de los llamados ‘sin casa’, se fueron uniendo al campamento y lo convirtieron en lo que la prensa local llamó una gran cloaca. El alcalde de la ciudad, Boris Johnson, quién impuso la demanda que ahora los desaloja, se había referido al campamento como una monstruosidad, sin embargo los impulsores de la manifestación, integrantes de la ONG ‘Democratic village’ afirmaron que el real desastre estaba dentro de la Casa de los comunes, que después de mandar a sus soldados a la guerra no debería llamarse Wesminster sino Westmonster.

Julio 15 de 2010, para Express News